22 de Marzo de 2024
Por Paula González Velásquez
El agua vale más que el oro, ¿cuántas veces escuchamos esta frase? Ya forma parte de las luchas populares en toda Argentina y me atrevo a decir, de América Latina. Todos somos conscientes de este hecho irrefutable: sin agua no podemos vivir. Desde que estamos en la escuela primaria nuestras maestras y maestros nos enseñan que aproximadamente el 70% del planeta es agua y que un gran porcentaje de nuestro cuerpo corresponde al agua. Pero, ¿sabías que de ese 70% de agua del planeta tan solo el 2,5% es agua dulce? Y que de ese 2,5%, ¿sólo el 0,025% está disponible para consumo humano? Las reacciones químicas que se llevan a cabo en nuestro cuerpo necesitan del agua para desarrollarse, el ser humano podría vivir un mes sin comer, pero sin agua… no viviríamos más de una semana. Así de importante es el agua, por eso algunos la llaman “oro azul”. Son muchísimos los activistas ambientales que lo dejan todo por defender al ambiente, un caso conocido es el de Berta Cáceres, activista de Honduras que fue asesinada por defender un río sagrado donde querían construir una represa hidroeléctrica y así dañar al río, a los peces y el sustento de muchas familias.
Sin embargo, a pesar de su importancia y de las luchas, no todo el mundo tiene acceso al agua, se calcula que más de 1.100 millones de personas carecen de acceso a agua potable y millones deben caminar unos 10 kilómetros al día, o más, para conseguirla. Y lo que es más preocupante, no todos son conscientes de que debemos cuidarla, más del 80% de las aguas residuales regresan a los ecosistemas en crudo, sin recibir ningún tipo de tratamiento. En Bariloche somos unos privilegiados, estamos rodeados de cuerpos de agua: lagos, ríos, arroyos, hasta glaciares, pero toda esa agua forma parte de un ciclo, el ciclo del agua, que también nos enseñaron en la escuela, ¿se acuerdan? Todo y todos estamos conectados de alguna manera, por eso si nosotros comenzamos a cuidar el agua que nos rodea, indirectamente podemos ayudar a otras personas en otras partes del mundo. «El aleteo de las alas de una mariposa se puede sentir al otro lado del mundo», es un proverbio chino y la base del efecto mariposa, que a su vez es uno de los conceptos de la teoría del caos, todo lo que hacemos repercute en otro lugar. ¿Te animás a repercutir y ayudar al ambiente? Estate atento a la siguiente nota donde te contaré un poco más, y lo mejor es que son acciones completamente realizables, de hecho desde la Defensoría del Pueblo de Bariloche las practicamos.