La Red de Género de la Asociación de Defensores del Pueblo de la República Argentina (ADPRA), expresa su pesar por los nuevos femicidios ocurridos en la ciudad de Paraná y Concepción del Uruguay y llama a emprender actividades de formación y sensibilización que permitan la construccción de una sociedad en la cual las niñas y mujeres puedan gozar de sus derechos, especialmente el derecho a vivir una vida libre de violencias.
Los femicidios de Romina Ibarra y Lidia Milessi; Johana Carranza, Luciana Ledesma y Candela Ledesma enlutan a la provincia de Entre Ríos y al país todo, engrosando la triste cifra de femicidios esta vez de dos mujeres de 35 y 45 años en manos de un suboficial de la Prefectura, Orlando Ojeda, que había sido pareja de ambas víctimas; una de ellas, madre de tres niños, hecho que ocurrió en Paraná; en tanto que en Concepción del Uruguay fueron asesinadas esta madrugada Johana Carranza, Luciana Ledesma y Candela Ledesma (sus hijas de 5 y 7 años); asesinadas por Juan Pablo Ledesma, ex pareja de la víctima, quien además asesinó a la actual pareja de Johana.
Los femicidios constituyen una de las formas más extremas de violencia hacia las mujeres, se trata de un asesinato que tiene particularidades por lo que se incorporó un concepto nuevo para distinguirlo de los homicidios. Se trata del asesinato cometido por un hombre hacia una mujer a quien considera de su propiedad, en la mayoría de los casos relacionados por un vínculo. Constituyen un fenómeno social que da cuenta de la violencia estructural que sufren niñas y mujeres, propias de una cultura que acusa graves desigualdades entre hombre y mujeres denominada cultura Patriarcal.
Se estima que hay un femicidio por día en el país, pero sabemos que la cifra es mayor puesto que aun no existen estadísticas oficiales. Desde 2008 la Asociación Civil La Casa del Encuentro realizó el primer informe de Femicidios en Argentina y con el objetivo de ampliar y profundizar los monitoreos en el año 2009 se conforma el “Observatorio de Femicidios en Argentina Adriana Marisel Zambrano”. Sus números emanan de los asesinatos de mujeres que aparecen en algunos medios de comunicación, por tal motivo los datos son parciales.
El asesinato de una mujer en manos de un hombre, o el asesinado de hijos e hijas de una pareja (femicidios vinculados) ocurre en razón de su género. El concepto Femicidio fue desarrollado por la escritora estadounidense Carol Orlock en 1974 y utilizado públicamente en 1976 por la feminista Diana Russell, ante el Tribunal Internacional de Los Crímenes contra las Mujeres, en Bruselas.
El gran movimiento de mujeres que denuncia a lo largo de la historia la desigualdad y la violencia que padecen mujeres y reclama por sus derechos, motorizó tres expresiones de repudio masivo hacia este delito. Las jornadas del Ni Una Menos son un alerta que informa que pese a los avances normativos como la sanción de la Ley Nacional 26.485, las obligaciones adquiridas por el Estado a fin de resguardar su seguridad, hay elucuentes deudas que hacen que las violencias hacia las niñas y mujeres no disminuyan.
Recordamos que la normativa existente expresa obligaciones concretas a los distintos Ministerios y organismos públicos involucrados en la denominada “ruta crítica de las violencias”, obligaciones que no pueden eludirse.
Entendemos que la transformación cultural que permita dar paso a una sociedad justa e igualitaria, lleva tiempo, pero ese tiempo será más breve si cada organismo e institución hace lo que obliga la ley, pero también aquello que esté al alcance de todos y todas, de cada persona, en pos de la promoción y protección de nuestros derechos.
Dra. Andrea Galaverna
Defensora del Pueblo de Bariloche
Coordinadora de la Red de Género de ADPRA